impresiones transmisión fuerza vivacidad

Al hablar de la creencia Hume afirma que esta consiste en:

Formulación 1: “Una idea relacionada o asociada con una impresión presente” [1.3.06.15]
Formulación 2: “Una idea relacionada o asociada con una impresión presente” [1.3.07.06]
Formulación 3: “Una idea vivaz con una impresión presente” [1.3.07.06]

La creencia implica a otros principios que la respaldan:

En primer lugar se encuentra el "principio de prioridad": “Toda idea se corresponde con una impresión la cual le da origen y a la cual se corresponde fielmente difiriendo únicamente en sus grados de fuerza y vivacidad ”.

En segundo lugar, el hábito que tiene la mente el cual le hace pasar de una idea a otra ya sea semejante, contigua o relacionada causalmente con la primera. Pero la mente no sólo relaciona ideas que contiene dentro de ella, sino que relaciona a estas ideas con impresiones presentes.

De este modo, cuando una persona observa una copa de vino, su mente la puede llevar a pensar en una lata de cerveza (semejanza), en la botella de vino o en el sacacorchos (contigüidad), o en alguna borrachera pasada (causalidad). De este modo una impresión presente se relaciona con ideas que no están presentes, pero que se encuentran listas para hacerse presentes a pesar de estar albergadas en lo más recóndito de la mente. Estas ideas son experiencias pasadas y, como tales, contienen cierto grado de vivacidad debido al principio de prioridad.

La creencia está basada en la relación de causalidad. De este modo el que ve una botella de vino (o una caguama o un pulque o lo que gustéis) en manos de su amigo cree que para este fin de semana habrán de ponerse una buena borrachera. Esta idea de la borrachera en realidad es un recuerdo en su mente que ha sido traído por la impresión presente, es decir, ha salido de las sombras y se presenta en la atención con toda la fuerza de una idea a la cual se le pone atención ahora.

Pero la atención en la mente no basta para despertar la creencia pues podemos pensar ahora en todo esto y no por ello creer que este fin de semana seremos parte de la fiesta. Es necesario que se sume un sentimiento generado por la probabilidad del hecho. Pensar en la borrachera de este discurso no produce el mismo sentimiento que pensar en una borrachera por ver de hecho a un amigo invitándonos a ella. En el primer caso la situación es sólo una quimera, en el segundo se vuelve muy probable.

El elemento de la probabilidad y su función dentro de la creencia es analizado por Hume a partir de 1.3.11.